domingo, 22 de julio de 2007

GÓNGORA VE UNA GOLONDRINA

A Ignacio Ruiz-Pérez


Góngora ve una golondrina.

Desde los ojos del ave, de la pluma del poeta


brotan signos que son eco de su visión.


La golondrina ve a Góngora.


En los ojos del poeta se refleja


la línea que deja el ave


como negro eco de plumas


en el cielo español.


Si hacia atrás fuera el vuelo


—piensa el bardo—


esa tijera flotante cortaría


no el aire


sino la lógica misma del cielo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

La última imagen es perfecta, casi flota de tan transparente: felicidaes por este poema!!

Eduardo Hidalgo dijo...

Gracias, Hermanito, este espacio es tuyo también.
Un abrazo